No seas feliz, sé agradecidx

Empecemos por otra de las frases típicas que a veces nos dicen: "Sé feliz!". Imperativo y doloroso. Primero que te lo digan te hace sentir automáticamente infeliz y segundo que sea de forma imperativa te hace pensar en rebeldía, uno siente la presión. En este contraconsejo queremos explicarte que no estamos en contra de que seas feliz, sino que hay un camino más corto para serlo y empieza de otra manera.

Hablemos de la felicidad, esa inmensa alegría que dura por tiempo limitado y que muchas veces se ve opacada por miedos a perder ese estado en el que estamos, y lógicamente hacemos que dure mucho menos de lo que esperamos. Hace poco vi una charla de Brené Brown, una profesora e investigadora de la Universidad de Houston que estudia la valentía, la vulnerabilidad, la vergüenza y la empatía desde hace veinte años. En una de sus exposiciones habló justamente de la felicidad y comentó lo siguiente:

"Cuando estamos abrumados por el amor y la felicidad, nos sentimos vulnerables, por lo que ensayamos la tragedia. Aunque me gano la vida estudiando emociones aterradoras como la ira y la vergüenza, creo que la experiencia humana más aterradora es la alegría. Es como si creyéramos que al sentir verdadera felicidad, nos estamos preparando para recibir un puñetazo."

Creo que todos experimentamos lo mismo cuando estamos contentos, tememos que termine por lo que autoboicoteamos ese momento para tener algo de sabor amargo de forma moderada para no morir en un halo de adrenalina. 

Brené cuenta que para ser felices y no fallar en el intento hay que primero agradecer. Apenas estemos sintiendo el sabor amargo de que algo pueda pasar hay que reemplazarlo por un: "Doy las gracias porque...". 

No hay que temerle a ser felices, ni sentir culpa ni tener miedos. Pero tampoco digamos frases hechas como "Sé feliz" que tan simples parecen y no tienen fundamento, cambiémosla por un "Da las gracias por todo lo que lograste, da las gracias porque aunque no estés en tu mejor momento estás avanzando poco a poco hacia algo mejor cada día".

Aquí mi contraconsejo: No seas feliz, sé agradecido primero. Es más, aún cuando te sientas depresivo da las gracias porque tenés salud, porque comiste algo rico, porque podés hacer lo que te gusta si elegís hacerlo.

By Dick, Tom, Harry!